Las asociaciones entre objetos de información permiten construir modelos de información que trabajan mejor |
La necesidad de asociar objetos de información la encontramos a cada momento cuando diseñamos estructuras de información. Por ejemplo, un contenido que tiene una cita o una relación de aclaración o complementariedad como “Véase” o “Véase también”, muy típica en el medio académico, está asociando dos objetos de información, el contenido inicial y el referenciado. Un matrimonio en un registro civil asocia a dos personas en el matrimonio, pero también a la autoridad civil y los testigos con el acto realizado, cada quien en su rol. Un registro de un profesional en un curso de Postgrado es también un ejemplo simple.
Pensemos, para describir en detalles la idea, un caso muy común en todo tipo de ambientes laborales. En todas las oficinas se lleva un directorio de personas. Incluso en un ejemplo sencillo como éste puede apreciarse lo que significa modelar estructuras de información. Así, pensemos que en el directorio de personas existe la posibilidad de especificar el lugar de trabajo de las personas que registramos en el directorio. Por ejemplo: Carlos González trabaja en el Ministerio de Agricultura.
Puede considerarse que la institución de trabajo, en el ejemplo, el Ministerio de Agricultura, es simplemente un dato de la persona (una propiedad clasificadora en el sentido en que lo explicamos recientemente (Ver Propiedades de Objetos de información) que nos es útil para seleccionar a todas las personas que trabajan allí. Pero si nos detenemos un poco podemos caer en cuenta que, frecuentemente, la institución donde se trabaja no es un campo de la persona sino una relación de ésta con otro objeto de información: la institución. La institución no debe ser tratada como un dato, un nombre clasificatorio, sino como una información (un conjunto de datos con estructura). El punto es que la institución, como objeto de información, tiene una semántica asociada (Ver Semántica de Información) y varios campos de datos que son completamente independientes de las personas que trabajan en ellas, por ejemplo, direcciones físicas y electrónicas, teléfonos institucionales, sitio Web, etc.
La distinción es esencial para el Arquitecto de Información. Si asumimos que la institución es un mero atributo de descripción de una persona, después, por ejemplo, la dirección del trabajo será igualmente un atributo de la persona. No hay relación estructural entre el nombre de la institución donde se trabaja y la dirección del trabajo. En cambio si lo que establecemos es una relación entre la persona y la institución, la dirección será un atributo de la institución. Examinamos los datos de la persona y vemos que trabaja en una institución y examinando la institución podemos ver cual es la dirección (de la institución y por ende del trabajo de la persona). En el caso del primer modelo decimos Carlos González trabaja en el Ministerio de Agricultura y la dirección del trabajo de Carlos es Avenida Bolívar, Nro 1027. En el otro caso decimos Carlos González trabaja en el Ministerio de Agricultura y éste queda en la Avenida Bolívar Nro 1027. En el segundo modelo se maneja el concepto de asociación. En el primero no.
Cuando añadimos más instancias, por ejemplo, más personas que trabajan en el Ministerio de Agricultura, nos damos cuenta que, en efecto, con asociaciones entre objetos de información se modela mejor la Estructura de información.
No hay comentarios:
Publicar un comentario